SARA ALIAGA / PÁGINA SIETE. Un albañil repara uno de los nichos en el Cementerio General.
Sacabrillos y albañiles en el Cementerio General son muy requeridos antes de esta celebración; trabajan sin descanso y son bien pagados.
Página Siete / Wendy Pinto / La Paz
Faltan pocas horas para celebrar Todos Santos y mucha gente acudió ayer al Cementerio General de La Paz con el propósito de hacer limpiar y adornar los nichos de sus seres queridos.
Para lograrlo gastan desde 15 hasta 2.500 bolivianos. Albañiles y sacabrillos trabajan sin descanso.
"Cuando éramos pequeños mi papá nunca nos hizo faltar nada. Por eso ahora, que tenemos un poquito más de plata, le haremos colocar mármol de 2.500 bolivianos, aunque sea en su nicho”, dijo don Limberth Hernani, quien llevaba una pieza de mármol con la imagen de Jesucristo hacia el nicho de su progenitor; atrás le seguía un albañil que le iba a cobrar 180 bolivianos por dicha restauración.
Varias personas, al igual que él, recorrían los pasillos del camposanto junto con los sacabrillos y albañiles para remozar los nichos.
Don Roberto Mamani, albañil de profesión, utilizaba su martillo y una punta para sacar los trozos de estuco que le perjudicaban para colocar el nuevo molde de una tumba. "Arreglo nichos desde mi juventud, utilizo cemento y estuco para la base, cerámica y mármol para el revestido. También colocamos rejas, todo a pedido del cliente”, explicó y recalcó que iba a cobrar 180 bolivianos por su servicio.
Mientras tanto, dos adolescentes esperaban que el albañil acabara su trabajo y la llegada de sus papás para colocar las flores y un muñeco de morenada en la tumba de su querido tío.
Los sacabrillos recorrían con sus mochilas pegadas a la espalda largos pasillos, en los que otras señoras les decían: "luego vas a venir aquí”. Con su sombrero y brillo metálico Vladimir Poma, de 19 años, repasaba los bordes de una rejilla con un líquido especial. "Pintamos, sacamos brillo, eso no más; antes de Todos Santos nos va muy bien, depende si es grande cobramos 15, si está muy oxidado 20”, aclaró.
Otras familias prefirieron traer a su propia mano de obra para hacer un retoque a la última morada de su ser querido. "Un retoque es apropiado por Todos Santos, por eso trajimos a nuestro jardinero, nos cobrará 80 bolivianos por el arreglo”, afirmó la señora María Eugenia Valencia.
Por otro lado, don Gonzalo Cahuaya Troche, junto con su familia, limpió con detergente y arregló el nicho de su suegra, Josefa Chura, quien falleció hace tres años. "Estamos limpiando la tumba de mi suegra, para recibirla como ella se lo merece, limpia como le gustaba”, recordó y aseguró que iba a armar una mesita de Todos Santos en su casa.
No obstante, la familia de la señora Brenda Quiñones limpiaba la tumba de su suegro, Marcelino Morales, junto con sus hijos, mientras su esposo lavaba los floreros para colocar los claveles que tanto le gustaban a su papá. Cuando terminó de secar la cerámica, doña Brenda empezó a armar una mesita con pequeñas t’anta wawas, panes y frutas. "Le vamos a dejar pancito. A él le gustaba armar la mesita con claveles para sus papás y ahora nos toca a nosotros”, decía contenta.
Según la tradición aymara, las almas llegan el mediodía del 1 de noviembre a la mesa que arman sus familiares, sea en la misma casa o en el cementerio. Luego permanecen en el mundo terrenal por un lapso de 24 horas. Los familiares hacen rezar la mesa, que contiene panes, frutas, dulces, comida, bebida y coca para despachar a las almas a partir del mediodía del 2 de noviembre.
Lo aceptable y lo prohibido
- Cementerio General Las puertas del camposanto se abrirán el 2 de noviembre a las 7:00 y estarán siendo controladas por 200 funcionarios de la Alcaldía Municipal en coordinación con miembros de la Guardia Municipal. Se puede ingresar con comida, pan, frutas, refrescos y cañas, pero se prohíben las bebidas alcohólicas.
- Rezadores Los tradicionales rezadores podrán ingresar al Cementerio General, al igual que los músicos. En el cementerio La Llamita se podrá armar mesas de Todos Santos.
Lo aceptable y lo prohibido
- Cementerio General Las puertas del camposanto se abrirán el 2 de noviembre a las 7:00 y estarán siendo controladas por 200 funcionarios de la Alcaldía Municipal en coordinación con miembros de la Guardia Municipal. Se puede ingresar con comida, pan, frutas, refrescos y cañas, pero se prohíben las bebidas alcohólicas.
- Rezadores Los tradicionales rezadores podrán ingresar al Cementerio General, al igual que los músicos. En el cementerio La Llamita se podrá armar mesas de Todos Santos.
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