EL DIARIO
El consumo de alimentos y bebidas en recipientes o envases descartables de poliestireno, muy conocido en el país como plástico o plastoformo, termina dañando el organismo del ser humano, según datos de investigaciones realizadas en diferentes países del mundo.
Estos envases se han convertido en elementos prácticos, especialmente cuando uno adquiere comidas rápidas o “chatarra” o en las cafeterías que se usan para refrescos e incluso en las fiestas o entradas folklóricas, sin saber el daño que pueden provocar en la integridad humana.
Entre las comidas rápidas, es muy frecuente, cuando le preguntan: “¿Es para comer aquí o para llevar?”, pues generalmente se deciden por la segunda opción, pero al tomar esa decisión expone su salud, porque su organismo absorberá tóxicos del plástico y plastoformo que expele por la humedad y por el calor y también por el contacto del agua en los vasos desechables tan comunes en Bolivia, como en restaurantes, tiendas, fiestas, entradas, en el consumo de gaseosas y otros.
MUY ESTÉTICOS
Los productos de plásticos a primera vista se observan muy estéticos, funcionales e incluso higiénicos que es el argumento actual en el medio para su utilización.
Estos vasos y platos de plástico o plastoformo no son tan buenos como aparentan y las empresas que la producen tratan de minimizar sus efectos. En el país existen muchas distribuidoras de producción peruana y otros las fabrican en distintos departamentos.
Los peruanos ya alertaron de la toxicidad del producto y las fábricas direccionan estos plásticos hacia Bolivia e ingresa en ingentes cantidades al territorio nacional con o sin autorización.
Según estudios realizados en varios países, los envases liberan sustancias químicas y tóxicas, entre ellas el estireno que es un tipo de plástico inestable. Sin embargo, cuando el alimento o bebida es grasosa o está caliente (café), el plástico o plastoformo se convierten en un material inestable, afectando al sistema nervioso y podría ser causante de cáncer.
PROHIBICIÓN
Estados Unidos prohibió el uso de envases descartables de poliestireno expandido para bebidas y alimentos, que fue inventado por el científico estadounidense Otis Ray McIntire en 1941.
“El material es muy difícil de reciclar, casi imposible. Un plato por ejemplo no puede ser reciclado para convertirlo en una taza”. Estos recipientes dañinos nos llaman a tomar los recaudos necesarios por la salud. Estos daños se detectaron en animales marinos cuando por error se comieron los vasos desechables o platos y su organismo reflejó el daño. Sin embargo, una buena opción para el uso de recipientes sería de cartón, como lo implementan algunos restaurantes de comida chatarra o rápida en el país.
¿CANCERÍGENOS?
Los científicos analizaron al estireno, componente para fabricar vasos para servir café y envases térmicos para envolver comida. Diez expertos del Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos se reunieron para evaluar el peligro de este agente artificial.
En el Informe Nacional de Toxicología Programa 12 sobre carcinógenos, indica que el estireno se “anticipa razonablemente que sea un agente carcinógeno humano”.
Los expertos no señalan que “causa cáncer en el ser humano” directamente, el informe es importante, pero tampoco sostienen que el estireno es inofensivo para el ser humano.
ALTERNATIVAS
“Varios estudios revelaron anteriormente una posible relación entre una alta exposición al estireno y daños en las células humanas, algo que podría derivar en distintas condiciones, debido al deterioro como cambio en la calidad espermática, un mayor riesgo a desarrollar distintos tipos de cáncer como leucemia, cáncer cerebral y médula ósea”.
Según estudios, para las personas que trabajan a diario en la industria de los plásticos, fotocopias, decoración, imprentas, construcción y otros, el estireno puede ingresar al cuerpo por vía respiratoria, digestiva o a través de la piel, por el contacto con plásticos como el poliestireno (plastoformo).
“Los recipientes de plastoformo con el contacto del calor hace que emita un gas que contamina el ambiente y los alimentos”. Los recipientes son baratos, ligeros, resistentes, inertes y un buen excelente aislante térmico. Todas estas características han convertido al poliestireno en uno de los “envases populares” en la industria alimentaria.
En supermercados, los vemos tanto para el envasado de alimentos frescos como para los platos preparados. En restaurantes y cafeterías son de uso común a vista y paciencia de los mismos consumidores. Francia fue uno de los primeros países en prohibir los envases de plástico y a futuro pretende reemplazarlo por otros biodegradables, en base a productos naturales. Se incluye a las famosas bolsas de plásticos de uso común en el país, pues su repartición está prohibida en los supermercados, mientras que en Bolivia crece este tipo de servicios.
En la ciudad de La Paz, al igual que en el interior del país, no se tienen datos sobre la cantidad de basura de envases plástico y del efecto que podrían causar en el futuro en la estructura de la tierra y el agua.
Los efectos que podrían causar estos productos pasan desapercibos, empero avanzan de manera silenciosa; por tanto, las autoridades correspondientes deben tomar cartas en el asunto, profundizando estas investigaciones, debido a que los ciudadanos bolivianos están expuestos a la toxicidad de estos envases de plástico y plastoformo.
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