lunes, 22 de octubre de 2018

Chapetón plantea norma que permitiría legalizar bares clandestinos y nuevos

OBJETO. La presente ley municipal tiene por objeto establecer los requisitos, procedimientos y condiciones para la otorgación de licencias de funcionamiento y autorizaciones, que permitan regular las actividades económicas, dedicadas al consumo, expendio, comercialización y transporte de bebidas alcohólicas.Semanario Los Andes

El concejal por Soberanía y Libertad (Sol.bo) Javier Tarqui informó que la alcaldesa Soledad Chapetón presentó al Concejo Municipal un proyecto de ley que, de ser aprobado, permitiría la apertura de nuevos bares y otros locales de expendio de bebidas alcohólicas y también que los clandestinos legalicen sus actividades; situación que –advirtió- podría generar mayor inseguridad en El Alto.

Se trata del proyecto de "ley de Licencias de Funcionamiento y Autorización de Actividades Económicas dedicadas al Expendio, Consumo, Comercialización y Transporte de Bebidas Alcohólicas", remitido por la alcaldesa Chapetón al Concejo Municipal, donde es analizado por los concejales; antes de ser tratado para su aprobación o rechazo.

OBJETO DEL PROYECTO DE LEY

Tarqui, secretario del Concejo Municipal, leyó el Objeto y el artículo 8 del proyecto de ley y explicó que ambos puntos demuestran que, de ser aprobada, la norma abriría la posibilidad de otorgar licencias de funcionamiento a bares clandestinos y nuevos.

INCOHERENCIA

Al recordar que locales de venta de licores son considerados focos de inseguridad y delincuencia, Tarqui afirmó que es "una incoherencia de la alcaldesa querer legalizar los bares clandestinos e ilegales" y agregó que, "con esta ley estaría permitiéndolo; cuando deberíamos hacer todo lo contrario: preservar nuestra juventud, nuestro núcleo familiar; porque por el consumo de bebidas alcohólicas se están desintegrando familias y crece la inseguridad ciudadana".

De acuerdo con informes del municipio, son 719 los establecimientos de expendio de bebidas alcohólicas, legalmente autorizados en El Alto; mientras los clandestinos e ilegales serían más del doble, alrededor de 1.500; según estimaciones de unidades policiales y de la Intendencia Municipal.

Tarqui informó, citando versiones policiales, que en los bares clandestinos se ha verificado varias veces la presencia de antisociales y menores de edad, que consumen bebidas alcohólicas adulteradas y nocivas; en ambientes que no cuentan con las mínimas condiciones de salubridad e higiene.

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