La Alcaldía de El Alto benefició con cuatro contratos por adjudicación directa y un monto global de 143 mil bolivianos; a la Fundación Jisunú del empresario Samuel Doria Medina, líder de Unidad Nacional (UN) y, por ello, jefe político de la alcaldesa Soledad Chapetón; factores que generan sospechas de un posible tráfico de influencias, para favorecer al también ex ministro de Capitalización, denunció el presidente del Concejo Municipal, Marcelo Fernández.
"Existe un direccionamiento en el tema de contrataciones de la Alcaldía alteña, en beneficio de la Fundación Jisunú, de propiedad de Doria Medina. Uso indebido de influencias en la gestión de Soledad Chapetón. La fundación Jisunú se benefició con cuatro contrataciones directas", enfatizó el concejal por UN, considerado disidente de ese partido.
Fernández recordó que, cuando Soledad Chapetón fue candidata por UN a alcaldesa alteña, "Doria Medina había ofrecido colaborar a la ciudad de El Alto con su Fundación Jisunú, una organización sin fines de lucro; pero ahora ocurre todo lo contrario, porque esta Fundación Jisunú de Samuel Doria Medina es la que se beneficia con contratos del municipio de El Alto y con el dinero de los alteños. Es muy lamentable, pero se tiene que enterar de esto la población", lamentó Fernández.
POSIBLES VÍNCULOS FAMILIARES
De acuerdo con los procesos de contratación presentados por Fernández a los periodistas, respaldados con la documentación completa de cada uno de ellos; Jisunú, la fundación de Doria Medina, fue contratada para la realización de cuatro consultorías, que le fueron adjudicadas, supuestamente, por influencia de Marcelo Renjel, asesor de la alcaldesa Chapetón.
Se apunta a una posible influencia de Marcelo Renjel, no sólo por ser asesor de Chapetón, sino porque la representante legal de la Fundación Jisunú es Silvia Beatris Doria Medina DE RENJEL, lo que generó sospechas de un posible vínculo marital entre ambos; lo que –de ser confirmado- constituiría un motivo más de susceptibilidad respecto a los cuestionados contratos entre el Gobierno Municipal de El Alto y la fundación del jefe de UN y de la alcaldesa Chapetón.
"Existe un direccionamiento en el tema de contrataciones de la Alcaldía alteña, en beneficio de la Fundación Jisunú, de propiedad de Doria Medina. Uso indebido de influencias en la gestión de Soledad Chapetón. La fundación Jisunú se benefició con cuatro contrataciones directas", enfatizó el concejal por UN, considerado disidente de ese partido.
Fernández recordó que, cuando Soledad Chapetón fue candidata por UN a alcaldesa alteña, "Doria Medina había ofrecido colaborar a la ciudad de El Alto con su Fundación Jisunú, una organización sin fines de lucro; pero ahora ocurre todo lo contrario, porque esta Fundación Jisunú de Samuel Doria Medina es la que se beneficia con contratos del municipio de El Alto y con el dinero de los alteños. Es muy lamentable, pero se tiene que enterar de esto la población", lamentó Fernández.
POSIBLES VÍNCULOS FAMILIARES
De acuerdo con los procesos de contratación presentados por Fernández a los periodistas, respaldados con la documentación completa de cada uno de ellos; Jisunú, la fundación de Doria Medina, fue contratada para la realización de cuatro consultorías, que le fueron adjudicadas, supuestamente, por influencia de Marcelo Renjel, asesor de la alcaldesa Chapetón.
Se apunta a una posible influencia de Marcelo Renjel, no sólo por ser asesor de Chapetón, sino porque la representante legal de la Fundación Jisunú es Silvia Beatris Doria Medina DE RENJEL, lo que generó sospechas de un posible vínculo marital entre ambos; lo que –de ser confirmado- constituiría un motivo más de susceptibilidad respecto a los cuestionados contratos entre el Gobierno Municipal de El Alto y la fundación del jefe de UN y de la alcaldesa Chapetón.
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