Entre 30 y 40 alojamientos que eran ilegales, prostíbulos, permitían el ingreso de menores de edad e infringían la Ley 259 de control al expendio y consumo de bebidas alcohólicas fueron clausurados entre mayo y julio, informó a El Alteño, el capitán Ruddy Saavedra, Intendente del Gobierno Autónomo Municipal de El Alto (GAMEA).
El Alteño
Saavedra aclaró que la Intendencia tiene tuición para verificar el tema de inocuidad, licencia de funcionamiento y el cumplimiento de la Ley 259, parámetros bajo los cuales se hicieron los operativos en coordinación con la Policía boliviana.
En los operativos también se encontraron varias irregularidades, entre ellas el ingreso de menores de edad, cuando la mayoría de las veces son parejas, además estos lugares piden el registro sólo del varón cuando la norma indica que todas las personas deben ser registradas en el libro.
“Hemos encontrado parejas, por ejemplo, un tipo de 30 años que estaba con una niña de 13 años, eso ya es un delito y tiene cárcel. En ese caso nosotros derivamos el hecho a la Defensoría de la Niñez para que tome las medidas respectivas”, acotó.
INOCUIDAD
La autoridad aclaró que varios de los alojamientos clausurados además de no contar con la respectiva licencia, encontraron condiciones deplorables en cuanto al mantenimiento del mobiliario.
Las sábanas sucias con muestras de heces fecales y sangre, ropa interior debajo del colchón, preservativos usados entre sábanas, hechos que también son delitos que atentan contra la salud pública.
COMBOS
Saavedra añadió que muchos edificios, principalmente de la Ceja de la ciudad de El Alto, albergan a restaurantes, alojamientos, bares y es mucho más fácil para los jóvenes arrendar un cuarto y continuar bebiendo debido a que el horario permitido es sólo hasta las tres de la mañana.
Otra irregularidad encontrada fue el trabajo sexual, que si bien no está prohibido, el mismo no se debe realizar en estos establecimientos porque tienen otro objetivo.
Varios jóvenes también fueron víctimas de las llamadas “pildoritas” ya que después de beber en un local, trasladan el festejo a los alojamientos donde son dormidos y las mujeres que aprovechan para sustraer sus pertenencias.
BEBIDAS
También la venta de bebidas alcohólicas en los alojamientos y sobre todo a menores de edad fue detectada. "Hemos encontrado a muchos jóvenes menores de edad consumiendo bebidas ahí dentro", dijo.
PROYECTO
El 23 de julio, la secretaria Municipal de Seguridad Ciudadana entregó el proyecto de ley departamental de Fortalecimiento a la Seguridad Ciudadana a la Asamblea Departamental con el objetivo de que todos los alojamientos, no sólo de la urbe alteña, cuenten con un mínimo de cuatro cámaras de vigilancia.
“Esta es una ley que no sólo favorecerá a la ciudad de El Alto, favorecerá a todo el departamento. No le va costar nada a la Gobernación y ni a las alcaldias nada, porque los alojamientos son negocios particulares”, aseveró Dorian Ulloa, secretario de Seguridad Ciudadana.
Mediante la normativa se obligará a estos establecimientos a instalar sistemas de vigilancia que estarán acordes a los requerimientos de la Policía.
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