EL DIARIO
La ciudadanía alteña que quiere ser beneficiada, no solo con la instalación de gas domiciliario, sino con otros beneficios que facilita este servicio básico, como calefones de agua y calefacción, podría ser estafada por un supuesto técnico que realiza ofertas, sin que las mismas sean ejecutadas. Marcelina Valencia es una de las tantas víctimas, quien fue sorprendida en su buena fe, por Juan Carlos Cuno, un supuestos técnico de contextura gruesa, piel morena, quien utiliza el uniforme oficial de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y porta recibos de esta institución pública, con la finalidad de lograr sus estafas.
RETIRO DE MEDIDOR
De acuerdo con la víctima, este supuesto funcionario utiliza, incluso, el credencial de la entidad pública, bajo el argumento de realizar la instalación de estufa a gas, con el propósito de evitar retirar el medidor de gas, porque supuestamente la familia no hacía uso este combustible.
"El cuándo se presentó en el domicilio preguntó por la propietaria, además de observar que en la vivienda no hacían uso del gas domiciliario, razón por la que planteó la posibilidad de retirar el medidor, por el no uso de este servicio.
Cuando dimos a conocer que pagamos Bs 8, como una suma mínima, esta persona que se presentó como técnico, incluso ingresó al domicilio a evidenciar la instalación del gas domiciliario", explicó.
La persistencia de Cuno para realizar la supuesta instalación de un calefón, no llamó la atención de la propietaria del domicilio, ubicado en Alto Lima, a quien solo le preocupaba que no le retiren el medidor.
COSTO DE BS 300
Cuno, quien se mantuvo sereno en la verificación al interior del domicilio de su víctima, incluso marcó los lugares, donde supuestamente debían ser instalados tres puntos, de donde se conectaría la estufa.
“Incluso me dijo tiene que ir a cancelar al banco, a una cuenta bancaria y que supuestamente llegarían otros técnicos, para que revisaran un supuestos permiso de instalación, permiso que tenía el costo de Bs 300", añadió.
Ante el poco interés de la propietaria, el supuesto técnico, advirtió que si marcaba su medidor, este tenía que ser retirado, aspecto que preocupó a la propietaria, quien para evitar ese perjuicio, decide pagar la suma de Bs 300.
Cuando consultaron a Cuno si por el pago de los Bs 300, él entregaba una factura, este solo dio a conocer que otorgaba un recibo, con el papel que tiene membrete de YPFB y en caso de requerir la factura, se podían aproximar al día siguiente a las oficinas de Yacimientos en la avenida Juan Pablo II, para obtener la misma.
Valencia, no dudó en realizar el pago y bajo el argumento de que garantizaba de que no le quieten el medidor y que podía ser favorecida con la instalación de una estufa, realizó el pago del dinero el día 30 del pasado mes.
NINGUNA ACCIÓN
Cuando Valencia se apersonó a YPFB, con el recibo y el reclamo de que la supuesta instalación de calefón jamás se había concretado, grande fue su sorpresa porque al interior de las oficinas de la entidad estatal, esa persona no estaba registrada como funcionario. Siendo todo una estafa armada, desde el uniforme, credenciales, recibos, marbetes, todo lo que Juan Carlos Cuno portaba, era falso y solo le permitió realizar más de una estafa en diferentes zonas peri urbanas de la ciudad de El Alto.
Pero lo que llama la atención es que al interior de las instalaciones de YPFB, la dirección Jurídica y las diferentes unidades de esta repartición no quieren dar a conocer cual es la tarea que realizan, no solo para formalizar la denuncia ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), sino el tipo de políticas comunicacionales se aplican para informar y prevenir a la población de futuras estafas a nombre de YPFB.
NIEGAN INFORMACIÓN
EL DIARIO solicitó una entrevista con la Dirección Jurídica, pero como es acostumbrado, dieron a conocer que los funcionarios públicos de esta entidad están prohibidos de hacer declaraciones y que la prensa solo puede ser atendida en las oficinas centrales en la ciudad de La Paz, pese a que las denuncias de estafas realizadas por supuestos técnicos de YPFB, están ocasionando diferentes reclamos por parte de la población alteña.
Mientras las denuncias no sean formalmente presentadas ante la instancia de investigación como la Felcc, la entidad pública de yacimientos, podría estar encubriendo este tipo de delitos, en caso de no asumir una política preventiva.
De acuerdo con la víctima, pese a haber formalizado la denuncia en YPFB, hasta la fecha no obtuvo ninguna respuesta por parte de la entidad y menos resultados de una investigación, llegando a perder de esta manera su dinero y confirmó la existencia de supuestos técnicos de la entidad de yacimientos.
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