El puente internacional Simón Bolívar (Venezuela), donde fueron quemados los camiones. Foto: EFE
Página Siete
Al menos dos muertos, uno de ellos un joven de 14 años, y más de 280 heridos, dejaron los disturbios de ayer en las fronteras entre Venezuela, Colombia y Brasil, donde los militares chavistas bloquearon el ingreso de ayuda humanitaria, informó el portavoz de un grupo de derechos humanos.
“Los dos muertos son producto de la represión de militares durante disturbios en Santa Elena de Uairén (Bolívar, sur). Ambos murieron por impactos de bala”, dijo Olnar Ortiz, activista en la zona de la ONG Foro Penal, crítica del Gobierno.
Los forcejeos se registraron en dos puntos de Santa Elena de Uairén. Vecinos en favor del ingreso de ayuda humanitaria colocaron barricadas en las calles para evitar el avance de los militares hacia la frontera.
Cinco heridos de bala en los choques con las fuerzas de seguridad en esa localidad fueron trasladados en dos ambulancias desde Venezuela a Brasil, según fuentes oficiales brasileñas, y a pesar del cierre fronterizo.
El estado de salud de los cinco es “grave”, señaló la secretaría de gobierno del estado de Roraima.
El viernes, otro enfrentamiento con militares dejó un muerto y 15 heridos en el asentamiento venezolano Kumarakapay, a poco más de una hora de la frontera con Brasil, cuando habitantes trataban de impedir el cierre fronterizo ordenado por el presidente Nicolás Maduro.
Inicialmente se habló de dos fallecidos, pero más tarde se constató que la segunda persona se recupera de graves heridas en un hospital del lado brasileño, según la ONG Provea.
Unos 36 militares permanecen retenidos por indígenas, informó en nota de prensa la Alcaldía de Gran Sabana, municipio donde se registraron los enfrentamientos el viernes.
“Los efectivos castrenses se encuentran detenidos en la selva”, indicó el escrito.
Las fronteras de Venezuela con Colombia por la región de Táchira y con Brasil fueron cerradas por orden de Maduro, que considera la ayuda como un pretexto para una intervención militar de Estados Unidos.
Hasta el cierre de esta edición se cuentan al menos 285 heridos en los disturbios que se desataron en el principal puente fronterizo entre Colombia y Venezuela, por donde la oposición intenta ingresar ayuda básica pese al bloqueo de fuerzas venezolanas, según fuentes de socorro.
Los heridos son venezolanos que pretendían cruzar con asistencia hacia su país por el puente Simón Bolívar, cerrado la víspera por orden de Maduro, cuando fueron reprimidos con gases lacrimógenos. Catorce de ellos debieron ser trasladados para recibir atención médica, dijo un funcionario de Defensa Civil bajo reserva.
Camiones quemados
Por la tarde, tres camiones repletos de ayuda humanitaria fueron incendiados en uno de los dos puentes en la frontera entre Colombia y Venezuela, cuando los militares venezolanos bloqueaban el paso de una caravana de cuatro furgones y lanzaban bombas lacrimógenas contra manifestantes. Guaidó responsabilizó en Twitter al gobierno de Nicolás Maduro, al que llamó “régimen usurpador”.
Según indica El Nacional, tres de los camiones que iniciaron la caravana hacia Venezuela con gran cantidad de alimentos, desprendían “humo negro”. Una situación que sorprendió a los opositores que se encontraban en el lugar.
Imágenes de video que circularon en las redes sociales y en canales de internet muestran a decenas de personas sacando de los camiones bolsas y cajas con medicinas y alimentos, en medio de una gran nube de humo.
“Nuestros valientes voluntarios están realizando una cadena para salvaguardar la comida y las medicinas. La avalancha humanitaria es indetenible”, aseguró Guaidó.
Los camiones iban en una caravana de cuatro furgones que intentaron ingresar a Ureña, luego de que manifestantes rompieron una barrera puesta por la GNB.
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